En la biblioteca del IES
de Castuera, con los alumnos del Ciclo de Administración y Finanzas,
se ha celebrado el bicentenario de la promulgación de la
Constitución de Cádiz de 1812, llamada “La Pepa”
Se ha tratado la
importancia de éste texto jurídico en todo el constitucionalismo
español. La Declaración de los Derechos del Hombre de 1789 y la
Constitución francesa de 1791 sirvieron de modelo a los
constitucionalistas gaditanos. Luego ella sirvió como modelo a
postriores constituciones.
Hemos estudiado los
principios que ella contiene como son : La soberanía nacional, la
división de poderes (Legislativo,Ejecutivo y Judicial), la libertad
de expresión y prensa, la igualdad ante la ley, la prohibición de
la tortura, etc
Fue el inicio del
liberalismo español.
En aquellas Cortes de
Cádiz había dos ilustres diputados por Extremadura que habían
nacido en la Serena: Diego Muñoz-Torrero Ramírez de Moyano (Cabeza
del Buey) y Manuel Mateo Luján y Ruíz (Castuera) y el ilustre
bibliotecario Bartolomé José Gallardo (Campanario)
DIEGO MUÑOZ-TORRERO RAMÍREZ-MOYANO
Nació en Cabeza del Buey
el 21 de enero de 1761, hijo de un boticario y maestro de latín,
estudio en Salamanca Teología y Filosofía. Se ordenó sacerdote y
fue nombrado en 1784 catedrático de Filosofía en la Universidad de
Salamanca. En 1787 fue nombrado por unanimidad rector de la
Universidad de Salamanca.
El 24 de septiembre de 1810, en la jornada inaugural
de las Cortes, es el primer diputado en intervenir haciendo varias
proposiciones revolucionarias de tipo liberal, en un brillante
discurso, breve pero con mucha fuerza:
La soberanía de la
nación reside en el pueblo,
Separación de
poderes,
La inviolabilidad de
los diputados
El reconocimiento de
Fernando VII como rey legítimo
El 2 de marzo de 1811, por 78 votos, fue nombrado
presidente de la comisión redactora de la Constitución, y fue una
de las figuras más destacadas en la redacción de esta primera
Constitución liberal que tuvo España, aprobada el 19 de marzo de
1812 y llamada por ello "La Pepa”.
Fue un clérigo impregnado del humanismo del siglo
XVIII que rendía tributo a la razón sin ceder un ápice de terreno
a sus convicciones religiosas.
En 1828 fue detenido en Portugal y encarcelado en la
cárcel de Santa Juliana de Lisboa, por la desconfianza que
inspiraban sus ideas liberales, sufriendo malos tratos y
humillaciones. Murió el 16 de marzo de 1829
MANUEL MATEO LUJÁN Y RUÍZ
Nacido en Castuera en
1770, estudió Derecho en Salamanca. Amigo de Muñoz-Torrero y junto
a él, en Salamanca, se formó en la ideas de la Ilustración y del
liberalismo.
Ejerció la pasantía de
abogado en la misma ciudad a la par que impartía docencia como
profesor universitario, en 1785 obtuvo el título de doctor en leyes
y cánones. En 1793 ingresó como relator del Supremo Consejo de
Castilla.
Cuando terminó
Muñoz-Torrero su discurso inaugural, Manuel Luján leyó el borrador
de un decreto que recopilaba todo lo dicho, que sentó las bases de
todo nuestro liberalismo y los supuestos de la futura Constitución
de 1812.
Tuvo una destacada
participación en los principales debates y decretos de reforma, así
como en las discusiones constituyentes, y en especial en la libertad
de imprenta, la abolición de la inquisición. Fue nombrado por las
Cortes ministro de Justicia (el primero de la historia constitucional
española) cargo que no llegó a ejercer por su temprana muerte, con
50 años, víctima de la epidemia de fiebre amarilla que en aquella
época asoló la ciudad de Cádiz en 1813.
BARTOLOMÉ JOSÉ GALLARDO
Y BLANCO
Hijo de humildes labradores, estudió filosofía en
Salamanca donde fue bibliotecario de la universidad. leyó
activamente a los filósofos ilustrados del enciclopedismo francés.
Especialmente le influyeron las ideas de Locke. Las Cortes, reunidas
en el oratorio de San Felipe Neri en Cádiz, le nombraron su
bibliotecario.
En 1811 publicó el célebre Diccionario
crítico-burlesco del
que se titula diccionario razonado manual, que es la
sátira anticlerical más dura y difundida de la época de las Cortes
de Cádiz y constituye una de las obras claves y más influyentes del
anticlericalismo español de la primera mitad del siglo XIX.
En 1814, restablecido Fernando VII en el trono,
Gallardo huyó de España junto a otros liberales y de Lisboa pasó a
Bristol y desde allí a Londres. Allí compuso unos durísimos versos
donde juzga a todos los reyes españoles, desde los Católicos hasta,
denunciando su mediocridad, crueldad y poco valer y demostrando un
buen conocimiento de la historia de España. En 1820, restaurado el
régimen liberal, volvió a España y recuperó su antiguo cargo de
bibliotecario del Congreso de los Diputados.
Fiel a sus orígenes, fue un liberal republicano y
anticlerical hasta el fin de sus días, bibliófilo apasionado.
Literariamente le atrajo el Romanticismo y cultivó un estilo algo
amanerado a causa de su amor por los arcaísmos y las antigüedades
castizas del lenguaje. Se destacó como periodista satírico ya
durante el periodo de las Cortes de Cádiz y compuso numerosos
folletos (se han contado por lo menos unos noventa) para atacar a los
políticos tradicionalistas o amantes de las componendas.
Murió en Alcoy en 1852.
ACTIVIDAD A CARGO DE MANUELA MORILLO ANES
PROFESORA DEL CICLO FORMATIVO DE ADMINISTRACIÓN Y FINANZAS